Tras visitar Rusia, durante el mundial, Elder nos invita a perdernos por Moscú.
Para ello utilizaremos el metro, conocido como el «palacio subterráneo». Tiene 212 estaciones y una longitud de tendido subterráneo de 365 kilómetros con 14 líneas.
Seguro que nos servirá para movernos por toda la ciudad, pero cuidado en no tomarlo en horas puntas ya que es el primero del mundo por densidad de pasajeros.
Recorramos la ciudad en busca de esta maravilla de estaciones, y vayamos con tiempo porque seguro que nos entretendremos en alguna de ellas ya que algunas de ellas parecen salones de algún palacio.