Salimos del cine para tomar un descanso con la lectura.
Blancaestela nos presenta un interesante juego, quizás para desafiarnos a nosotros mismos antes de la búsqueda.
Este tiene que ser tal, este lo leí, este debí haberlo leído, este lo leeré… este que será?
Y cada uno es la puerta a un mundo único creado por su autor, con el que recorremos geografía y épocas a nuestro modo, con nuestra única interpretación. ¿Acaso no es eso mágico?